Utensilios 101: decantador de vino

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El decantador de vino es una herramienta muy utilizada por los consumidores y amantes de vino. Algunos dicen que debe usarse con todos los vinos sin distinción y otros que únicamente debe ser aplicado en vinos selectos. En fin, hoy queremos contarte todo sobre él por si no lo conocías o profundizar un poco más en sus características.

¿Qué es?

El decantador de vino es una vasija hecha de cristal y tiene una forma característica: su base es más ancha que la boca, esto con la finalidad de “airear” el vino. El nombre se le otorga por el proceso de decantación, el cual consiste en la separación de dos sustancias (líquido y sólido) resultando en una degustación de vino completamente óptima y, por supuesto, sin sedimentos.

Gracias a este pequeño proceso, el vino toma color, se atempera y además, se oxigena. Por ejemplo, si lo aplicas en vinos envejecidos, permitirá que los posos queden en la base del recipiente y así degustes un resultado excelente.

Historia 

Algunos expertos dicen que su origen proviene de los antiguos jarrones de barro romanos que eran destinados exclusivamente para el vino. Sin embargo, otros aseguran que esta vasija se deriva de la evolución de ciertas licoreras francesas que tienen una utilidad similar al decantador de ahora, pero en su caso terminaron llamándose aireadores.

Por qué se debe utilizar un decantador de vino

  • Los amantes y expertos aseguran que este proceso es necesario para poder disfrutar del verdadero sabor y experiencia que trae esta bebida. Esta postura nace porque se ha visto que, cuando el vino durante su crianza se ha sometido a un embotellado durante un tiempo, sus aromas quedan reposados, incluso podría decirse como “cerrados”.

Es por eso que, si se decantan, estos vinos terminarían reproduciendo sus aromas originales. Si se sigue esta misma línea, lo recomendado es que este proceso se lleve a cabo en vinos de al menos 2 años.

  • Por otra parte, los consumidores utilizan este utensilio porque al parecer, los taninos -sustancias que añaden tanto amargor como astringencia y complejidad al vino- gracias a él, se integran consiguiendo así un sabor muy agradable. 

Confiesan que, una vez el vino se ha decantado, este consigue liberar aromas ocultos con toques afrutados. 

Datos importantes:

  • En los vinos jóvenes, la decantación consigue potenciar los aromas de una forma exitosa, puesto que contribuye a su oxidación
  • En los vinos añejos este proceso se realiza para separarlos de su sedimento y acelerar su oxigenación.

¿Cómo se utiliza?

Los resultados se consiguen de la siguiente manera:

Debes verter el vino suavemente por las paredes del decantador. Si el vino que estás vaciando es joven, viértelo directamente en el decantador. Si por otra parte, el vino es añejo, debes procurar realizar este proceso lentamente y evitando que el sedimento pase al recipiente (debe mantenerse dentro de la botella). 

Manera correcta: Si el vino es de más de 10 años, lo que debes hacer es dejar una parte sin verter en el decantador.

Por último, deja airear el contenido durante al menos 5 minutos para que se oxigene y reproduzca todos sus aromas y sabores.

Tipos

Decantadores de máxima oxigenación: puedes reconocerlos por su boca más ancha y estructura de paredes pronunciada, lo que permite que vinos demasiado añejos se oxigenen de una manera óptima y así se eliminen posibles sabores desagradables.

Decantadores de mínima oxigenación: estos, por el contrario, tienen una boca más angosta y paredes menos pronunciadas, las cuales estarán en contacto con el vino al momento de verterlo y permitirán una oxigenación menos exagerada.

Tip: En caso de que no tengas decantador y te encuentres en una reunión con amigos, puedes optar por utilizar una jarra, jarrón o incluso un vaso de vidrio. Pero, si quieres realizar este proceso de manera más profesional e introducirte de lleno al mundo del vino, te recomendamos adquirirlo. 

¿Qué te pareció? ¿Lograste resolver preguntas y conocer las cualidades del decantador? 

Antes de que te vayas, permítenos dejarte este dato: Meritxell Falgueras, experta en vinos, recomienda que los vinos tintos, ya sean jóvenes o viejos, deben decantarse mínimo 60 minutos antes de degustarlos. Además, antes de la decantación aconseja que la botella permanezca 24h en forma vertical para que así te asegures que los sedimentos permanezcan en el fondo de la botella. 

¡Cuéntanos más tips que tengas para disfrutar de un buen vino!

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