El Wok es un utensilio de cocina originario de China, en realidad, se podría decir que es el más representativo de su gastronomía. Pero, con el tiempo, ha cruzado fronteras exitosamente, posicionándose como uno de los favoritos entre los cocineros.
Origen
Para empezar, su significado es ‘recipiente para cocer’. Este surgió de la necesidad de cocinar alimentos con poco combustible, gracias a su forma, que es como la de una sartén, pero grande y profunda está diseñada para difundir el calor desde su base, lo que provoca un menor tiempo de cocción.
Usos y beneficios
Normalmente, los alimentos se cortan en trozos pequeños para poder cocinarlos fácilmente en el wok. Como te decíamos, terminó siendo con el pasar de los años un recipiente básico para cocinar, ya que permite todos los tipos de cocción: freír, cocer al vapor, saltear o hervir, pero uno de los métodos más valorados de este utensilio es poder cocinar sin añadir o usando muy pocas grasas (aceites), aparte, claro, de su rapidez.
Gracias a esta capacidad de cocinar casi sin grasas, se lo considera como un gran elemento para la cocina saludable. Además, se ha visto que los vegetales hechos en el wok resultan ser crujientes y muy apetecibles al gusto. No obstante, conservan más vitaminas y minerales a comparación de otros métodos de cocción más largos.
¿Qué tipo de wok debo usar?
Existen woks de todo tipo de material. Sin embargo, los más recomendados son los de hierro fundido, aunque es un poco pesado y aparatoso puede ser el más duradero. Algo parecido se piensa sobre el acero inoxidable, pero al final, la decisión depende de tus necesidades y tipo de cocina.
Por otra parte, si bien su formato original es cóncavo para someterlo a fogones de llama, existen versiones con una base plana que permite ser usado en cualquier cocina.
¿Cómo se conserva?
El wok, al igual que casi todos los utensilios de cocina, necesita cuidados particulares para su mantenimiento y durabilidad. Eso sí todo dependerá del material con el que está elaborado, por lo que es importante que sigas las instrucciones del fabricante para un buen uso y servicio de este.
Pero, si no las encuentras, puedes seguir indicaciones generales como utilizar espátulas o cucharas de madera para no rayar o gastar el material, lavarlo delicadamente y guardarlo en un lugar seguro. También debes saber que generalmente suele venir acompañado de su tapa, de una rejilla que te permitirá escurrir frituras, cocinar al vapor o mantener calientes alimentos que ya se han cocinado e, incluso, algunos vienen con una espumadera o un cesto de bambú.
Tips para cocinar con wok
- Los ingredientes deben estar troceados en un tamaño casi igual entre ellos para que la cocción sea homogénea.
- Primero debes poner a cocinar los ingredientes que necesitan más tiempo de cocción.
- Normalmente, los alimentos que se preparan en wok suelen quedar con una textura un poco más al dente, pero los quieres más cocidos, sólo debes cubrir el wok con su tapa para que se cocinen en menos tiempo.
- El aceite que se utiliza para cocinar en wok debe ser suave, de semilla o de girasol.
- Si quieres dorar los alimentos puedes agregar unas pocas cucharas de aceite, pero si quieres un término algo hervido, puedes utilizar mucho menos o reemplazar con agua.
- Los productos a los cuales queremos extraer el aroma también deben ir primero.
- Debes estar pendiente de los alimentos en todo momento, moverlos y en lo posible, jamás dejarlos por estar ocupado en otra cosa.
En fin, este es un utensilio muy funcional, por lo que no implica elaborar solamente platos específicos de la gastronomía asiática, sino que podemos adecuar muchos de nuestros platos a la elaboración en wok para disfrutar de una comida saludable y muy rica. Lo único que debes tener presente siempre es tener todos tus ingredientes preparados, limpios y troceados, para ir introduciéndolos en su momento y tener resultados excelentes.
Y tú, ¿ya utilizabas el wok?
