El queso es uno de los alimentos más consumidos en el mundo y de él se desprenden diversas variedades, ya que se puede elaborar con leche de vaca, cabra u oveja dándole diferentes tratamientos. En realidad, se trata de un concentrado de proteínas, vitaminas, sales y minerales, además de materia grasa fácilmente digerible, por lo que la OMS lo recomienda para el consumo en la dieta de manera regular.
Además, se le atribuyen beneficios como:
- Ser una gran fuente de calcio
- Ser rico en aminoácidos que protegen los huesos y dientes
- Contener bastante ácido fólico beneficioso para personas embarazadas
- Ayudar a formar y recuperar masa muscular, entre otros.
Si bien solemos solamente comprarlo, existen muchas maneras de preparar nuestro propio queso en casa, obteniendo un queso fresco, criollo, saludable y fácil de incluir en diversas recetas. Además, al hacerlo, obtendremos el suero de la leche de vaca que no solo puede ser parte de recetas de repostería, sino también contiene diferentes cualidades como:
- Contener aminoácidos esenciales
- Aportar vitaminas C, D y E
- Contener calcio, magnesio y potasio
- Llevar consigo el 20% de las proteínas de la leche de partida
- No contener hidratos de carbono y por lo tanto, tampoco calorías
- Beneficiar la flora intestinal
Por ello, hoy queremos presentarte esta receta tan increíble que pensarás que te has perdido de esto toda la vida:
Detalles
Para un queso de 315 g
90 minutos
Ingredientes
2 litros de leche líquida pasteurizada (no de larga duración ni leches vegetales)
75 gramos de yogurt natural o crema agria (opcional)
1/4 taza de vinagre blanco o jugo de limón (o un poco más)
1 cucharadita de sal
Direcciones
- En una olla de acero inoxidable suficientemente grande, colocar la leche y calentar a fuego medio hasta que comiencen a aparecer pequeñas burbujas que suben por el borde de la leche y comienza a salir humo, lo que indica que casi va a hervir, alrededor de 22 minutos.
- Cuando la leche esté caliente, pero todavía no haya llegado al punto descrito en el paso anterior, sacar 1 taza de leche y agregar el yogurt o crema agria y mezclar. Cuando llegue al tiempo de los 22 minutos, y que la leche esté al punto de hervir, agregar la leche mezclada con el yogurt o crema y el jugo de limón o vinagre. Verás cómo de inmediato se separa la leche formando la cuajada, quedará un suero amarillento separado de la cuajada. Si esto no sucede, debe agregar un poco más de ácido para lograr que la leche se separe bien.
- Retirar la olla del fuego, retirar la cuajada con ayuda de una cuchara con orificios o colador. Drenar el producto colocando la cuajada en un colador forrado con una tela limpia; también puedes utilizar simplemente la tela.
Colocar la cuajada en una taza, agregar la sal y mezclar con la mano o un tenedor. En este punto puedes dejarlo grumoso, como un queso ricotta o seguir al siguiente paso de prensarlo para tener un queso más firme. En este paso también puedes agregar hierbas, pimentón, ají dulce u otros ingredientes para “aliñarlo” - El suero puedes guardarlo en un recipiente de vidrio y refrigerarlo, te durará más de una semana en perfecto estado.
Para prensar el queso, enrosca la coladora o el lienzo, para ir sacando el suero y que vaya tomando forma; cuanta más presión al prensarlo y tiempo de drenado, mas firme será el queso.
Cuando el queso esté a temperatura ambiente, envolverlo en un plástico, que quede bien apretadito y si desea, puede colocarlo en un envase para que tome forma redonda, cuadrada, como desee. Refrigerar por al menos 24 horas. Servir y disfrutar
La idea es que te salga la mejor receta a ti. No tengas miedo de intentarla, verás que el resultado es delicioso, ya podrás tener queso fresco cuando tú quieras y puedes ser creativo, pues como verás tienes la posibilidad de añadirle ingredientes que dependan de tu antojo o para lo que quieras utilizarlo. Esperamos que te haya servido la información y te animes, sorprenderás también a tus invitados.
Y tú, ¿ya sabías que podías preparar tu propio queso en casa?
Fuentes: México en mi Cocina, Bizcochos y Sancochos, Miss Blasco, La Vanguardia