La tuna es originaria del hemisferio occidental, desde Norteamérica hasta la zona Andina de Sudamérica, que además de disfrutarse como fruta, en la antigüedad se la utilizó para tratar diversos padecimientos y problemas de la salud desde hace por lo menos 12 mil años.
Con una planta singular, que se trata de un cactus, ha cautivado el paladar de muchos y aliviando las dolencias de otros pese a su singular forma y composición de su cáscara, la cual lógicamente lleva espinas. Sin embargo, es muy refrescante y por lo tanto, hidratante.
Habiendo dicho todo lo anterior, hoy queremos presentarte aquellas propiedades que derivan en cualidades positivas para la salud de quienes la consumen:
Tiene propiedades antioxidantes
Estas propiedades antioxidantes y desintoxicantes nos ayudan a neutralizar los radicales libres, los cuales provocan el envejecimiento celular, y a reducir y desechar sustancias tóxicas. Así que un consumo regular podría ayudarnos a mantenernos sanos.
Lleva un alto contenido de vitamina C
Al llevar un contenido bastante considerable de esta vitamina, el consumo de la tuna nos ayudará a evitar resfríos, así como a favorecernos en la recuperación de la gripe común.
Es baja en calorías
Al estar compuesta mayormente de agua, la tuna resulta en una fruta baja en calorías y grasas, cualidad que puede ayudar a personas que deseen mantener su peso, incluso como una buena opción para una merienda saludable.
Favorece al sistema digestivo
Las semillas que contiene esta fruta, las cuales son totalmente comestibles, nos ayudan a reducir los problemas de estreñimiento. Asimismo, son buenas para combatir la gastritis, la acidez estomacal y úlceras gástricas.
Es diurética
Nuevamente, por su contenido en agua, consumir tuna nos ayuda con nuestros riñones, ya que mejoramos nuestra circulación de orina y regulamos nuestra digestión.
Ayuda a reducir el colesterol y triglicéridos
Los antioxidantes y otros compuestos que lleva consigo la tuna, contribuyen en la reducción de los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre, claro, si su consumo es regular.
Contribuye a la salud de nuestros huesos
Gracias a su contenido en calcio y magnesio, aquellos minerales que proporcionan salud a la estructura ósea, la tuna resulta en un alimento ideal para cuidar nuestros huesos.
Mejora la función plaquetaria
Al provocar este efecto, el mecanismo por el que trabajan las plaquetas funciona correctamente. Las mismas, son células que permiten la correcta coagulación de la sangre, por lo que permitirá curar antes ciertas heridas.
Refuerzan el sistema inmunológico
Según los resultados de diferentes estudios realizados, se piensa que el consumo de tuna puede estar ligado a la eliminación de toxinas y activación de antioxidantes debido a sus altos niveles de vitamina C y E que precisamente ayudan a potenciar nuestro sistema inmunológico.
La tuna es una fruta bastante singular por su forma, sabor y componentes, pero todo ello la hace efectiva para cuidar nuestra salud. Aprovecha que está de temporada y disfruta de todos sus beneficios con el sabor más refrescante.
Y tú, ¿ya consumías tuna?
Fuentes: La Vanguardia, Agraria, El Universal, Cocina Delirante