El menudito es un platillo típico de Bolivia, específicamente de la región de Los Valles que lleva casi 30 años deleitando los paladares de los comensales que se toman el tiempo de degustarlo. Se trata de un conjunto de sabores únicos y con toques diferentes a los que se acostumbran en nuestra gastronomía, pero que resultan ganadores.
Su origen se remonta al año 1993 en la ciudad de Cochabamba gracias a la señora María Teresa Samos Arana, una mujer cocinera proveniente de Chuquisaca, quien llegó a La Llajta para transmitir los sabores de su tierra a través de su restaurante llamado “Sucremanta”. Ella creó este platillo dándole su propia sazón basándose en los sabores que ya se conocían, como los del Fricasé y otros con la presencia del ají.
Siguiendo el lema que caracteriza a su establecimiento: “El sabor de Sucre en el corazón de Cochabamba”, reprodujo este platillo que también se trataría de una receta de familia con modificaciones de su mano. Su nombre, por otro lado, fue designado por la manera en la que se sirve: en un plato de barro pequeño, aunque también puede incrementar dependiendo el apetito del comensal.
Las personas recurrían al restaurante ubicado en la calle Esteban Arze cada vez con más frecuencia, convirtiéndolo en un plato popular y muy solicitado, junto a otras preparaciones que se ofrecían en el día. Esto lo convirtió en un emblema de la gastronomía cochabambina.
Sin embargo, también lo es para Chuquisaca, pues como este restaurante rescataba los sabores de este territorio, la población asumió que podrían encontrarla en el mismo lugar tanto en el mercado como en otros negocios. Ante tanta petición, cariño y la historia que lo precedía, también se empezó a preparar en este y por lo tanto, se lo comenzó a considerar típico.
Ingredientes
Aunque en otros países se encuentran platos parecidos, incluso en el nombre, este no consta de menudencias, sino que, por el contrario, es preparado con tres tipos de carnes magras: pollo, chancho y res cortadas en trocitos. Estas son servidas en compañía de un caldo bien aliñado y combinado con ají colorado de Padilla, uno de los favoritos de la capital del país.
Además, este platillo contiene maíz pelado o mote, perejil y cebollín picado. Eso sí, el ingrediente clave que lo caracteriza es un chorrito de limón que se ubica junto a todos los demás ingredientes en el típico plato hondo de barro y se degusta junto a un buen trozo de pan, así como a un frío y refrescante vaso de cerveza negra o rubia.
Aunque ya se puede consumir en diversos restaurantes alrededor del país de una manera deliciosa, muchos aseguran que no existe uno que haya igualado el sabor de doña María Teresa, pues en la receta de “Sucremanta” se incluye un aderezo secreto que le da esa autenticidad.
Cabe destacar, además, que se lo conoce por ser un gran remedio contra la resaca o el popularmente conocido “chaki”, por lo que regularmente es consumido temprano por la mañana para brindar toda la energía que se perdió la noche anterior.
Como verás, se trata de un platillo exquisito que ha sabido ocupar su lugar y ganarse el corazón de una gran cantidad de la población. No te pierdas sus sabores y pruébalo en cuanto tengas oportunidad, aseguramos que no te arrepentirás.
Y tú, ¿probaste el menudito de doña María Teresa?
Foto de portada: La Rufina
Fuentes: Gastronomía Bolivia, Opinión, Sabores de Bolivia