Tupiza es una ciudad y municipio ubicada en el sur de Bolivia, reconocida como capital de la Provincia Sud Chichas del departamento de Potosí. Se encuentra geográficamente encerrada en el valle del río Tupiza, y se le atribuye gran parte de la región de los chichas, dedicada a la minería y donde se observa una riqueza paisajística.
Esta ubicación, en el valle del territorio ancestral “Chichas”, procede desde mucho antes de los quechuas y la conquista española. La ciudad como tal, también está situada cerca de la frontera con Argentina, formando un bello y colorido valle a unos 2.900 metros de altura.
Además de ser una tierra testigo de diversos hechos y personalidades históricas y fundamentales dentro de la herencia boliviana, se da a conocer por ser un importante centro agrícola, ferroviario y de comercio, donde se encontraban minas como la de “Choroma (plata), Chillcobija y Oploca (antimonio), San Vicente (plomo-plata-zinc), Morados (plomo-zinc), y muchas otras minas ricas en cobre, wolfram, estaño, oro, etc”.
En cuanto a su biodiversidad, sus suelos vallunos son fértiles, en los que se produce sobre todo maíz, frutas, y hortalizas. Sin embargo, la población también se dedica a la cría de ganado caprino y la producción de leche y queso, siendo el medio fundamental de subsistencia para muchas comunidades correspondientes al territorio.
“Los Chichas”, la población y cultura más llamativa se dedicó desde hace cientos de años al arte de alfarería, tejidos y vestimenta, pero en conjunto con los demás grupos aledaños a la creación y reproducción de diversas recetas que utilizan muchos productos producidos en la misma región, combinando técnicas ancestrales y aquellas nuevas que se quedaron luego del paso de la época de la colonia.
Muestra de esto es uno de los trabajos que atesora la gastronomía boliviana: el libro y legado de Josepha de Escurrechea, quien nació en Potosí el año 1736 y es reconocida como la autora del recetario más antiguo que se conoce en la actual Bolivia. Se cuenta que por el año 1767, la misma redactó este importante recetario que da cuenta de los “últimos días coloniales en el Alto Perú” y nos deja “algunos de los testimonios más antiguos de platos típicos que son, hoy en día, íconos de la comida criolla”.
De acuerdo con la historiadora Beatriz Rossells, en él se reflejan “las costumbres alimenticias del período y probablemente de dos siglos de vida de la aristocracia española en Potosí, pues los procedimientos no se improvisan, sino que se continúan por generaciones”.
Si ya te estás preguntando sobre qué platillos y bebidas típicas podemos encontrar en Tupiza, no te desesperes, aquí te dejamos algunos de los más conocidos:
Aloja
Chicha
Ratafia
Kalapurka
Ch’ajchu
Fritanga
K’atu chupe
Tamales
Humintas
Queso de cabra
Palqui
Chivo o cordero a la cruz
Picante de cabrito
K’asa Uchu
Como verás, este es un territorio con un legado muy importante para la gastronomía boliviana. Si estás de paso por esta ciudad no dejes de probar sus delicias y disfrutar de su increíble paisaje, pero mientras tanto, esperamos que te haya gustado conocer un poco más sobre sus tesoros.
Y tú, ¿alguna vez visitaste Tupiza?
Foto de portada: Jaime Trinh
Fuentes: Wikitravel, “Plan de ordenamiento turístico territorial del distrito VI del municipio de Tupiza” por: Egle Rominia Cruz Cazon y Roly Fernando Alvarado Mulluni, Parlamento Andino, Act Turism, Estado Plurinacional de Bolivia