Para un boliviano no hay nada más delicioso que un pan recién salido del horno, listo para ser degustado. Este placer es parecido a tomar una buena copa de vino, recordando tiempos que marcaron nuestras vidas. Esta es la experiencia Hay Pan, la cual tiene dos caras: en la mañana ofrece una variedad de desayunos, y en la noche se transforma en una vinoteca.
Sukko Stach, Alfredo Montecinos y Camila son los socios de este emprendimiento, quienes buscan revalorizar tanto sea la zona (Calle Murillo – zona Rosario) como los buenos vinos que Bolivia tiene. Sin embargo para empezar con este artículo, iniciaremos con la pregunta que de seguro todos se han hecho: ¿Por qué se llama Hay Pan? La respuesta nos la dio Sukko, señalando que algo que nunca puede faltar en la mesa de los bolivianos es el pan.
Un insumo que puede tener una forma redonda, en el caso de la “sarnita” y ovalada y alargada en el
caso de la “marraqueta”, consumido entre ricos y pobres, y que nos acompaña desde el desayuno hasta la cena. Sin embargo en Hay Pan, hay mucho más que solo pan, ya que puedes armar tu desayuno en las mañanas y por las noches encuentras una variedad de selectos vinos bolivianos acompañados con una tabla de piqueos que también puedes armarla.
Vale resaltar que absolutamente todo en este lugar es producto boliviano, ya que como habíamos mencionado, este lugar buscar revalorizar los vinos hechos en Bolivia, apoyando a familias productoras de vino en diferentes lugares de Bolivia, ya sean pequeñas o grandes producciones.
Igualmente señaló que se trabaja para fomentar la cultura del vino, una muestra de esto fue la visita de empresas como Márquez de la viña, o Casa de Campo quienes expusieron sus productos, y charlaron directamente con el cliente. No obstante en Hay Pan también encontrarás diferentes tipos de singani, Rataffia y Limonchelo.
Hay Pan está ubicado en pleno el centro paceño. Una señal de que estas cerca a este lugar es ver muchas peluquerías, esto hace característica a la calle Murillo, que por cierto nunca duerme. “Puede que vengas a las 3 de la mañana y siempre encontraras algo pasando”, dijo Sukko definiendo a esta zona como muy dinámica.
Y aunque este lugar solo tiene 16 asientos, cuando se llena, ¡se llena! Ya que en alguna oportunidad han entrado hasta 32 personas. Algo característico también es la música, donde sólo escuchas las que provienen de un vinilo, y si tienes uno puedes llevarlo y escucharlo mientras degustas algunas copas de vino proveniente de algún rincón de Bolivia.
Por último, si estás buscando un lugar donde quieras marcar el tiempo, y donde no quieres saber que va a pasar Hay Pan es tu lugar.