Lacayote: la calabaza blanca de Los Andes

Tiempo de lectura: 3 minutos

El lacayote, también llamado alcayota, alcayote, auyama, ayote, blanca, calabaza blanca, calabaza, victoria, cabello de ángel, zambo, etc., es una especie de calabaza procedente de las regiones de grandes altitudes del Neotrópico, dentro de los que se encuentran los siete países que constituyen el territorio andino, donde los habitantes lo domesticaron como un fruto u hortaliza, dependiendo del uso que se requiera en la gastronomía. 

Aunque ahora se la puede encontrar en las zonas medias o altas Latinoamérica, desde el norte de México hasta Chile y el noroeste de Argentina, su origen continúa siendo un misterio, pero todo recae que sucedió en Los Andes. No obstante, este se difundió como cultivo tanto dentro como fuera del continente americano, llegando a regiones como Europa, África, Asia, India e incluso Oceanía desde los siglos XVI y XVII. 

Esta planta herbácea de crecimiento anual y hábitos rastreros, lleva un tallo verdoso que puede alcanzar de 5 a 15 metros de altura y sus tallos largos arrojan zarcillos que utilizan para adherirse y trepar en la vegetación vecina. Por su parte, las hojas tienen una textura aterciopelada que ocupa todo su considerable tamaño y color verde oscuro, parecido a la planta que brota higos. 

No obstante, sus flores son igual de grandes, pero están formadas por pétalos carnosos de color amarillo o anaranjado. Finalmente, el fruto, que es lo que conocemos como lacayote, tiene una forma redonda, como una pelota bastante grande y pesada que puede alcanzar un diámetro de hasta 30 centímetros y pesar entre 5 y 6 kilogramos.

Este, en un principio, crece de un color verde, pero cuando llega a la madurez aparece en su cáscara una epidermis con un color de fondo blanquecino que acompaña las figuras reticuladas e irregulares de color verde. Por dentro, presenta una pulpa similar a la sandía, aunque esta es más seca, fibrosa y de un color mucho más claro, llegando a blanco con un sabor dulce.

En cuanto a su cultivo, este se realiza principalmente en zonas con mayormente climas templados y un poco cálidos. Dependiendo del área climática elegida para sembrarse, la espera de brotes puede ser anual (zonas templadas) o perenne (zonas tropicales). Eso sí, en ambos casos se debe tener cuidado con las heladas que pueden dañar la planta en su primera etapa de crecimiento.

El lacayote también es un alimento con bastantes propiedades nutritivas que derivan en beneficios como el ayudar a disminuir los niveles de azúcar en la sangre, su acción como antioxidante o su gran aporte en proteínas, fibra, carbohidratos, hierro y vitaminas, entre otros.

Usos 

Como dato interesante, debes saber que prácticamente todas las partes de su planta son utilizadas para algo. Las flores y brotes tiernos se consumen como verdura, por ejemplo, en la cocina italiana. Por su parte, el fruto maduro se presta para preparaciones como dulces y bebidas con azúcares agregados. El dulce en nuestro país, corresponde al relleno de las empanadas blanqueadas típicas de Tarija. 

En otros lugares, se realizan confituras acaramelando las hebras de la pulpa con jarabe de azúcar, lo que se conoce como cabello de ángel. Por su parte, las semillas, las cuales se reconocen por su contenido en lípidos y proteínas, son el ingrediente principal para postres o también pueden ser saladas y tostadas como snack.

Esperamos que te haya gustado saber más sobre este alimento procedente de una región tan peculiar e importante como son Los Andes, lo que continúa demostrando la increíble biodiversidad que alimenta nuestra gastronomía boliviana. Si tienes la oportunidad, pruébalo y disfruta de todos sus beneficios. 

Y tú, ¿ya probaste el lacayote?

Fuentes: GustuBlog, Flor de Planta, Cocina Delirante, Conabio, Magic Garden Sees

Compartilo en