El pistacho es un fruto seco procedente de Asia occidental y Asia menor, donde se comenzó a cultivar en zonas específicas como Irán, Turkmenistán, Turquía y Afganistán. Luego de unos años, este fue descubierto por egipcios y griegos, lo que provocó que su consumo se expandiera por todo el Mediterráneo y llegara prácticamente a todas partes del mundo.
Este, incluso, se produce el sur de Europa y el norte de África, así como en el continente americano. Con un color verde pálido y un sabor muy peculiar, resultan en los favoritos y más codiciados por la población, pues además de ser apetitoso, conservan un lugar privilegiado entre los alimentos de su clase debido a las propiedades nutritivas que posee.
Hoy te dejamos algunas de las más destacables:
Reduce los niveles de azúcar en la sangre
El consumir pistacho dentro de una dieta balanceada ayuda a mantener los niveles de azúcar en la sangre bajo control, pues se trata de una fuente rica en fósforo que ayuda a descomponer las proteínas, de modo que estas se conviertan en aminoácidos, favoreciendo la prevención de diabetes o el control de la misma.
Es un aliado contra el síndrome metabólico
De acuerdo con los expertos, el pistacho es un alimento beneficioso contra el síndrome metabólico, lo que quiere decir que ayuda a mejorar el perfil de lipoproteínas, disminuyendo el colesterol y los triglicéridos y beneficia la función endotelial, reduciendo a su vez el riesgo del estrés oxidativo y contribuyendo al control del metabolismo de la glucosa en sangre.
Es bueno para el corazón
Así como otros frutos secos, se lo asocia con la salud del corazón debido a que se constituye como una fuente natural de omega-3, antioxidantes, potasio y fibra, elementos que permiten el cuidado de los vasos sanguíneos en las personas, y por lo tanto, de nuestro sistema circulatorio.
Contiene muchos antioxidantes
Gracias a que es rico en antioxidantes y lleva algunos con él como el betacaroteno, la luteína o el gamma-tocoferol, contribuye en la ralentización o prevención de algunas enfermedades, cardiovasculares, degenerativas, el cáncer y hasta el propio envejecimiento celular.
Ayuda a prevenir la anemia
El conjunto de minerales como el cobre y el hierro apoya la asimilación de este último mineral, lo que lo convierte en un alimento óptimo para tratar casos de anemia y prevenirlos. Para potenciar su absorción es recomendable acompañarlo con otros alimentos ricos en vitamina C.
Reduce el estrés
Gracias al fósforo y hierro que contienen los pistachos, consumirlos puede ayudar a reducir los niveles de estrés y más bien mantener nuestro cuerpo con energía. Esta primera cualidad se debe a que es ideal para conseguir evitar la ansiedad, lo podemos disfrutar como un sencillo snack.
Cuida y mejora la apariencia de la piel
De acuerdo con expertos en España, el pistacho es un alimento recomendado para cuidar la belleza de la piel, pues al llevar vitamina E, además de generosas cantidades de vitamina A, previene el envejecimiento y fortalece, junto con los lípidos, las células de nuestra epidermis.
Ayuda a cuidar la vista
Este ingrediente, además, contiene luteína y caroteno, elementos perfectos para proteger la vista, previniendo la incidencia de problemas de vista como degeneración macular o cataratas.
Como verás, se trata de un alimento bastante completo y beneficioso para cuidar nuestra salud, siempre y cuando sea en las cantidades adecuadas, pues como todo en exceso, puede más bien crearnos conflictos. ¡Aprovecha todas sus cualidades!
Y tú, ¿ya sabías esto sobre el pistacho?
Fuentes: Catalana Occidente, Cuerpo Mente, Welife